Con la llegada del invierno, las nochebuenas llenan de color los hogares en México. Su tono rojo brillante y forma estrellada las han vuelto el emblema de la Navidad, pero su floración no ocurre por casualidad: depende de luz, temperatura y cuidados precisos.
Cuándo florecen las nochebuenas
En regiones cálidas y templadas, estas plantas florecen entre finales de octubre y mediados de diciembre. Los productores controlan la luz y la oscuridad para que estén listas justo en temporada navideña.
Si las tienes en casa, sabrás que están por florecer cuando:
- Las hojas superiores se tornan rojas o rosadas.
- El tallo se endurece.
- Los botones amarillos del centro comienzan a abrirse.
El secreto detrás de su color
Las nochebuenas responden al fotoperiodo, un proceso natural que hace que cambien de color cuando los días se acortan.
Durante el otoño, las noches largas y los días frescos provocan que las hojas verdes se transformen en rojas, rosas o blancas, dependiendo de la variedad.
Factores que determinan su floración
Su belleza depende de varios cuidados:
- Oscuridad total por al menos 12 horas cada día.
- Temperatura templada entre 18 y 22 °C.
- Riego moderado, sin encharcar.
- Fertilizante con fósforo y potasio durante el otoño.
Cómo mantenerlas vivas todo el año
Después de Navidad, muchas nochebuenas pueden sobrevivir y volver a florecer si se podan los tallos y se cuidan durante la primavera y el verano.
Con el regreso del otoño, y las condiciones adecuadas, la planta repetirá su espectáculo de color, lista para brillar otra vez en diciembre.
