El Instituto Nacional Electoral (INE) advirtió que la falsificación de credenciales para votar o la utilización de documentos falsos para obtenerla es un delito grave. Por ello, el INE ha reforzado sus protocolos de seguridad para prevenir que personas ajenas a la ciudadanía mexicana tramiten de manera ilícita la credencial para votar.
Elementos de seguridad avanzados para evitar fraudes
El INE destacó que la nueva credencial para votar está diseñada con diversos elementos tecnológicos de seguridad, tales como el elemento ópticamente variable (OVD), microtextos, tinta ultravioleta (UV) y ópticamente variable (OVI). Estos avances proporcionan mayor certeza sobre el origen y autenticidad del documento, dificultando su falsificación.
En total, la credencial cuenta con 16 elementos de seguridad distribuidos entre el anverso y reverso, que contribuyen a la protección de los datos personales de los ciudadanos.
Consecuencias legales para los responsables de falsificación
El Código Penal Federal establece que quienes alteren el Registro Federal de Electores o participen en la falsificación de credenciales para votar enfrentan penas que van de 3 a 7 años de prisión y multas de hasta 200 días. Además, la Ley General en Materia de Delitos Electorales refuerza estas sanciones, con una pena similar para quienes alteren el Padrón Electoral o participen en la expedición ilícita de credenciales.
La fotografía fantasma: un elemento clave de seguridad
Uno de los elementos más avanzados en la credencial para votar es la fotografía fantasma. Este software de seguridad crea una imagen única a partir de los datos del ciudadano, con un patrón variable que hace difícil su reproducción y contribuye a garantizar la autenticidad del documento.
El INE reafirma su compromiso con la protección de datos personales y la seguridad electoral, asegurando que las credenciales para votar continúen siendo una herramienta confiable y difícil de falsificar.
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