Puebla, Pue.- Víctor Sánchez Espinosa, arzobispo de Puebla, retomó sus actividades en la Diócesis después de un viaje a Ciudad del Vaticano, donde participó en varias reuniones convocadas por el Papa Francisco para fortalecer a la Iglesia en el continente americano.
El jerarca ofició la misa dominical en la Catedral, dedicada al Día del Padre y al primer aniversario del asesinato de los sacerdotes jesuitas César Mora Salazar y Javier Campos Morales en la comunidad de Cerocahui, Chihuahua. En la ceremonia religiosa se colocó una pancarta con las imágenes de los mártires, siguiendo la orden del Episcopado Mexicano de celebrar esta fecha en todo el país.
Asimismo, el arzobispo realizó oraciones por todas las víctimas de la violencia en el país, como Teresa Magueyal, madre buscadora asesinada en Celaya, Guanajuato, y las catequistas ultimadas por un grupo armado en Huajuapan de León, Oaxaca. También reconoció la labor de las madres de todos los desaparecidos en Puebla, algunas de las cuales estuvieron presentes en la misa.
En el ámbito religioso, el arzobispo destacó la conmemoración del Sagrado Corazón de Jesús, celebrada esta semana, y señaló que durante todo el mes de junio se celebra la fiesta del amor. Pidió a los católicos que no sean infieles y recordó que este mes habrá más celebraciones en memoria de San Luis Gonzaga, San Juan, la Virgen del Perpetuo Socorro, y San Pedro y San Pablo.
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