Puebla, Pue.- No podemos seguir generando odio, enemistad, el rencor, resentimiento o deseo de venganza. Estos males, son cáncer que crece de forma incontrolable con muchas formas de metástasis, fue el mensaje que dio este domingo el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa desde la catedral.
Al mismo tiempo que destacó que la violencia, actualmente es solapada por estructuras sociales que la fomentan para sacar provecho personal, por lo que en víspera de la Cuaresma llamó a pedir a Dios romper las cadenas violencia, producto de una sociedad deshumanizada.
Recordó a los católicos que el próximo miércoles será de ceniza y con ello inicia el ciclo de la Cuaresma, la ceniza es un símbolo para recordar al hombre lo que es y es oportunidad para hacer reflexión para ser mejor persona y amar al prójimo.
“Aprovechemos este tiempo especial de gracia y los invito a que el próximo miércoles, si van a recibir ceniza en alguna parroquia, dediquen un ratito de su tiempo para hacer un buen examen de conciencia, para pedirle perdón a Dios por sus pecados y para buscar el sacramento en la reconciliación”. propuso el pontífice.
Al final reprobó la violencia que generan grupos delictivos por la lucha de poder y el control de sus territorios y, al mismo tiempo, la que se genera en los hogares y en el entorno social que se traduce en agresiones.
“No es solo aquella violencia extrema generada, como lo vemos ahora, por bandas delincuenciales, por el crimen, en la lucha por el poder y el control de sus territorios, es también la violencia que se da día a día y que generamos en las calles y hasta en el propio hogar, violencia intrafamiliar y agresiones. A veces, por tonterías insignificantes”, expresó.