Este miércoles, Marisol Castro, exesposa de Fausto “Tano” Elizalde, hizo una impactante revelación al confirmar que su exesposo es adicto a la cocaína desde antes de la muerte de Valentín Elizalde en 2006. Según Castro, vivir con Tano fue una experiencia extremadamente difícil, marcada por estrés postraumático y una profunda depresión.
Marisol explicó que Tano, debido a su adicción, afectó no solo su salud mental sino también a la de sus hijas, quienes también vivieron las secuelas de esta situación.
Tano Elizalde se negó a recibir ayuda para su adicción
Marisol relató que Valentín Elizalde, preocupado por el bienestar de su primo, intentó internar a Tano en un centro de rehabilitación, pero él se negó rotundamente a recibir ayuda. Este rechazo a recibir tratamiento para su adicción es un factor que algunos señalan como posible motivo de su traición y la controversia que rodea su implicación en la muerte del cantante.
Amenazas tras las declaraciones sobre Tano Elizalde
En la misma entrevista, Marisol Castro reveló que, después de contar su historia, ha recibido fuertes amenazas. Aseguró que ha tenido mucho miedo debido a los mensajes que ha recibido, los cuales apuntan a que su familia podría sufrir daño. Según Marisol, estas amenazas se han intensificado debido a las revelaciones sobre la vida personal de Tano Elizalde y su adicción.
Estrés y salud mental: el costo emocional de las amenazas
Marisol, quien trabaja como enfermera, también habló sobre el estrés adicional que ha vivido debido a las amenazas, combinado con la presión de la pandemia de COVID-19. La situación de salud mental que enfrenta es un doble estrés, que la ha afectado profundamente.
#EXCLUSIVA Marysol Castro fue amenazada por sacar a la luz la historia de “Tano” y Valentín Elizalde #LoVisteEnVentaneando ?
— Ventaneando (@VentaneandoUno) May 6, 2020
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