Puebla, Pue.- En el marco del quinto domingo de Cuaresma, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, pronunció una homilía en la que enfatizó el valor de la vida humana y el deber de los cristianos de defenderla desde su inicio hasta su fin natural.
El prelado se basó en el relato evangélico de la resurrección de Lázaro, amigo de Jesús, para recordar que solo Dios tiene el poder sobre la vida y la muerte, y que los fieles deben confiar en su misericordia y seguir su ejemplo.
Sánchez Espinosa señaló que la vida es un don sagrado que debe ser cuidado y protegido ante las amenazas que la ponen en riesgo, como las enfermedades, la violencia, el aborto, la injusticia y la explotación.
Asimismo, exhortó a los católicos a ser promotores de una cultura de la vida, que respete la dignidad de toda persona desde su concepción hasta su muerte natural, sin discriminar ni despreciar a nadie por su edad, condición o circunstancia.
El arzobispo de Puebla invitó a los fieles a vivir con esperanza y fraternidad, buscando lo que santifica la vida y rechazando lo que la destruye. También los animó a prepararse para celebrar la Semana Santa con fe y devoción, recordando el misterio de la pasión, muerte y resurrección de Cristo, que es fuente de vida y salvación para todos.
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