Puebla, Pue.- En un revelador contraste de realidades en Puebla, elementos de la policía municipal que se encontraban fuera de servicio el pasado 16 de septiembre en la localidad de Santa Catalina fueron acusados de estar ingiriendo bebidas embriagantes, hecho que desencadenó en una respuesta violenta por parte de los propios agentes hacia los ciudadanos que los señalaron.
Los hechos, captados en video, muestran cómo quienes están encargados de velar por la seguridad y el orden público, en lugar de actuar como ejemplo, parecían ignorar sus propias responsabilidades y compromisos con la comunidad al disfrutar de bebidas alcohólicas en público. Además, su reacción violenta hacia los ciudadanos que simplemente señalaban su inapropiado comportamiento levanta serias preguntas sobre la conducta y la integridad de estos elementos de la policía.
#YaBastaConEsto Me hacen llegar este video donde al parecer cerca de 9 oficiales estuvieron tomando desde temprano afuera de un Oxxo, llegaron en diferentes vehículos, agredieron a la población de la Colonia Santa Catarina y un adulto mayor sufrió serías lesiones...1/2 pic.twitter.com/cojAQT0Mpu
— ★·.·´HeChIzErO`·.·★ (@Hechizero_38) September 21, 2023
Este incidente pone de manifiesto las preocupaciones persistentes sobre la conducta y la ética de algunos miembros de las fuerzas del orden en Puebla, lo que socava la confianza de la ciudadanía en las autoridades encargadas de mantener la seguridad.
Mientras tanto, el día de hoy, el presidente municipal Eduardo Rivera Pérez participó en la inauguración del Segundo Seminario Internacional de Seguridad Ciudadana en el Teatro de la Ciudad, donde destacó los supuestos esfuerzos de su administración para mejorar la seguridad en Puebla. Se mencionaron proyectos de construcción y mejoramiento de instalaciones destinadas a las fuerzas policiales locales, todo ello en un esfuerzo por promover la paz en la ciudad y más allá.
Sin embargo, la brecha entre las palabras y la realidad es evidente. Mientras el presidente municipal hablaba de la paz y la seguridad en un evento oficial, los incidentes en Santa Catalina ponían de manifiesto la falta de disciplina y profesionalismo de algunos elementos de la policía municipal. Este contraste subraya la necesidad urgente de abordar los problemas sistémicos que afectan a las fuerzas de seguridad y de garantizar que se cumplan los estándares éticos y de conducta, independientemente de las palabras pronunciadas en un discurso.