Puebla, Pue. El titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte, Guillermo Aréchiga Santamaría, informó que hasta la fecha, únicamente 6 mil unidades del transporte público han podido instalar cámaras de seguridad en su interior, de un universo de 10 mil que son aptas para este tipo de modificaciones, lo que significa que prácticamente en todo el año este tema no ha tenido avances.
En enero de este año, durante su comparecencia ante diputados del Congreso del Estado, el funcionario indicó que la instalación de cámaras de vigilancia que conectan a unidades del transporte público con el Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C5) tenía un avance del 60 por ciento.
Mientras que este 2 de marzo, Aréchiga Santamaría declaró que la pandemia del Covid-19 ha frenado toda la instalación de cámaras, lo cual era parte de la modernización del transporte público que se acordó tras el aumento a la tarifa del pasaje.
Recordó que no hay recursos públicos involucrados en este proceso, pues son los concesionarios de este servicio los que deben desembolsar dinero para cumplir con esta parte del acuerdo, por lo que prevé que solo cuando la actual crisis de salud llegue a su fin se podrá darle continuidad.
"Es una inversión inicial que hicieron los concesionarios, no hay recursos públicos, y esto ha significado un esfuerzo, porque no solo se paga la cámara, sino los datos y el internet para que funcione en tiempo real", comentó.
Tras acordarse el aumento del pasaje de 6 a 8 pesos con 50 centavos en octubre de 2019, se estableció un plazo de 120 días para que concesionarios del transporte público modernizaran sus unidades e instalaran GPS, cámaras de videovigilancia y botones de pánico, pero esta labor simplemente no se cumplió en el tiempo indicado, a pesar de que la propia dependencia amenazó con revocar concesiones a todo aquel que incumpliera.